El desempleo tecnológico en el siglo XXI (parte 4)
“La cosmovisión más peligrosa es la de aquellos que nunca han visto el mundo”: Alexander Von Humboldt
David Moisés Terán Pérez *
Buenos días estimadas(os) lectores de esta columna invitada. Que como siempre tengan un extraordinario martes. Desarrollando nuestro tema: el desempleo tecnológico en el siglo XXI, esta ocasión analizaremos datos cuantitativos importantes como los siguientes: El 47% de los empleos, será reemplazado por robots y/o por computadoras inteligentes entre los años 2025 al 2035, de acuerdo a un algoritmo desarrollado por Frey y Osborne (investigadores de The Oxford Martin School en el Reino Unidos de la Gran Bretaña), de acuerdo a una lista de 702 empleos de la lista del Departamento del Trabajo estadounidense [Oppenheimer, 2018]. Esta información ya la habíamos comenzado a ver desde el artículo de la semana pasada. A continuación, estableceremos la estadística laboral analizada por Frey y Osborne:
El ranking de los trabajos más amenazados:
Los empleos con un 99% de posibilidades de ser reemplazados son: Los vendedores por teléfono (telemarketing), los vendedores de seguros, los auditores de cuentas, los bibliotecarios y los agentes aduaneros. Ejemplo de ello, es la empresa Amazon™, que aprovecha la ventaja competitiva tecnológica, ya que su plataforma, le permite al cliente (potencial o cautivo) acceder a su catálogo de productos, ver las especificaciones, el precio y hasta las opiniones de otros compradores, y así tomar la decisión de comprar o no comprar. Y si el cliente decide comprar, termina su adquisición, haciendo el pago; y la aplicación le indica, en qué fecha aproximada recibirá su(s) producto(s) en el domicilio que tenga dado de alta el cliente, en dicha plataforma. ¡Todo ello, sin la intervención de un humano!
Entre los empleos con un 98% de posibilidades de ser reemplazados están: Ciertas actividades administrativas, los empleados bancarios, los árbitros deportivos. Actualmente, la mayoría de los bancos, han eliminado puestos de trabajo humano, ya que muchas acciones, las puede realizar el cliente, directamente en los multi-cajeros automáticos, y si tiene que hacer alguna operación que requiera la intervención humana, puede obtener su turno de acceso, utilizando su teléfono inteligente, tomándole una fotografía al código QR que para ese fin, ha generado el Banco.
Las actividades que tienen un 97% de ser sustituidos son: Las operadoras telefónicas, los vendedores en las tiendas, los agentes de bienes y raíces, los agentes de viajes, los cajeros, las recepcionistas y los camareros de hoteles y de restaurantes, los cocineros, los taxistas, y los mensajeros. Por ejemplo, si una persona desea salir de viaje, puede acceder al sitio web de las líneas aéreas de su interés, buscar su(s) boleto(s), hacer su reservación, pagar, y obtener sus comprobantes para su viaje, sin la intervención humana. Igualmente, un cliente, puede utilizar la aplicación Airbnb™ para buscar un alojamiento en el lugar que ha decidido viajar previamente. En la plataforma de Airbnb™, puede ver lo(s) alojamiento(s) de su interés a través de una amplia galería de imágenes, la ubicación del lugar, el precio, los comentarios de otros huéspedes, y así, finalmente tomar la decisión de qué alojamiento escoger, y hacer el pago correspondiente, sin la intervención humana.
Entre los trabajos que figuran con un 96% de riesgo de desaparecer, están los cocineros (que ya están siendo reemplazados por brazos robóticos, como en algunos restaurantes de sushi en el Japón); también las secretarias administrativas, los conserjes de hotel, las personas que atienden las casetas de información en las plazas comerciales y/o en lugares públicos como los aeropuertos, que cada vez más, están siendo reemplazadas por tabletas electrónicas o por robots con aspecto humanoide.
Las actividades que tienen un 95% de probabilidades de desaparecer a partir del año 2025, están los taxistas, los mensajeros y los transportistas (que serán sustituidos por vehículos autónomos; también los guías de turistas, los técnicos dentales, los técnicos farmacéuticos, los carniceros, los ayudantes de los abogados; así como los contadores. Actualmente, Tesla Motors™, está desarrollando vehículos autónomos, que harán que el manejo quede a cargo del auto, sin la intervención humana. Y para el transporte y la entrega de productos, algunas empresas, están utilizando drones para cumplir con su servicio de entrega a sus clientes.
Los empleos con un 94% de posibilidades de ser sustituidos son aquellos que tienen que ver con el almacenamiento y el procesamiento de la información; también los trabajos de oficina convencionales, hasta actividades en el área de ventas y de los servicios. En este caso, ya existen algunas aplicaciones informáticas (ofimáticas), que a través de la Inteligencia de Negocio(s), le permiten a los gerentes y a los directivos de las organizaciones, poder acceder a información importante en tiempo real, y de esa manera: Analizar-sintetizar-tomar decisiones.
Empleos, profesiones y actividades que se requerirán en el futuro:
La probabilidad de automatización de un trabajo, está estrechamente relacionada, con el nivel de habilidades, competencias, destrezas y conocimientos inherentes para realizar dicha actividad. Es decir, mientras más difícil sea sustituir al humano por un robot, en función de lo que desempeñe el humano, en esa misma proporción, mantendrá su empleo. Sin embargo, el trabajador humano no debe confiarse, ya que si los diseñadores y desarrolladores del robot, logran especializar al sistema robótico, el humano quedará vulnerable; y las organizaciones, están apostando más por la automatización, que por mantener al personal humano.
Las personas con altos niveles de habilidades, de competencias, de destrezas, y/o de estudios, estarán capacitadas para moverse hacia los nuevos empleos que surjan tanto en el presente, como en los próximos años.
La formación académica y las habilidades como la creatividad, la originalidad, la inteligencia social y emocional (que deberán enseñarse en las instituciones educativas), serán clave para las profesiones del futuro. Y, la formación académica, tendrá que ir mucho más allá de las actuales carreras unidimensionales como la Abogacía, la Medicina, o la Administración de Empresas.
Las nuevas carreras universitarias, serán cada vez más inter, intra y multi-disciplinares; e incluirán capacidades tecnológicas; así como habilidades de razonamiento crítico, la resolución de problemas, y el trato interpersonal.
Así pues, es importante darnos cuenta, que de acuerdo a lo desarrollado en esta saga, la mayoría de los empleos están en riesgo. Por lo que, es importante que con mucha autocrítica, nos evaluemos para verificar cuál es el conocimiento especializado que debemos tener en el presente y en el futuro, para mantener nuestro empleo; o para que nuestros clientes, nos sigan comprando, en caso de tener una unidad de negocio(s) propia. Ojalá que estos cuatro últimos artículos, nos ayude a conocer en la práctica nuestra(s) ventaja(s) competitiva(s); así como nuestras áreas de oportunidad, y las amenazas que puedan presentarse, con la finalidad de que estemos preparados(as) para seguir vigentes en este demandante y cambiante ecosistema laboral, económico y productivo. La próxima semana, iniciaremos una nueva saga. Saludos cordiales. (Continuará…)