Pachuca, Tizayuca y Mineral de la Reforma, los municipios con más suicidios en Hidalgo
• La Secretaría de Salud registró 126 fallecimientos por esta causa en el estado hasta el pasado 25 de octubre
🖋 Redacción – PACHUCA
Hasta el pasado 25 de octubre Hidalgo registró 126 suicidios y los municipios con mayor número de casos fueron Pachuca (15), Tizayuca (12) y Mineral de la Reforma (11), informó la Secretaría de Salud del estado (SSH).
La dependencia dio a conocer que en 2023 la mortalidad estatal por suicidio fue de 1.1 defunciones por cada 100 mil habitantes. Del total de casos, 83.3% corresponde a hombres y 16.7% a mujeres, mientras que la mayor tasa de mortalidad por suicidio se presentó en el grupo de edad de 15 a 19 años.
En un comunicado, la SSH resaltó que con el objetivo de prevenir este tipo de fallecimientos ha intensificado la difusión de las situaciones o factores determinantes de conductas suicidas para lograr una intervención de manera oportuna y brindar la atención adecuada.
De acuerdo con especialistas, el suicidio es un problema de salud mental. Más de 60% de los casos que se presentan a nivel mundial están asociados a problemas de depresión.
Sin embargo, existen diferentes factores que pueden incidir en una decisión suicida, tales como problemas de autoestima y trastornos por abuso del alcohol o drogas, violencia, enfermedades crónicas o terminales, además de problemas económicos y emocionales, o eventos repentinos, como el fallecimiento de algún ser querido, un divorcio o separación de la pareja, indicó la institución.
La mayoría de las veces, precisan los especialistas, la conducta suicida se puede detectar de manera anticipada. Entre los principales signos destacan los siguientes:
- Sentimientos de desesperanza, con visiones negativas del futuro
- Conversaciones sobre la muerte de manera reiterada, aun cuando no se esté hablando del tema
- Amenazas sobre querer hacerse daño o atentar contra su vida
- Sentimientos abrumadores e intensos de culpa, vergüenza y odio hacia sí mismo
- Sentimientos de soledad, desamparo e insignificancia
- Ira o furia desmedidas
- Aumento o abuso en el consumo de alcohol u otro tipo de sustancias psicoactivas
- Falta de energía
- Incapacidad para experimentar placer con actividades cotidianas
- Alteración en los patrones de sueño o alimentación
- Descuido en la apariencia personal
- Dificultades para concentrarse, pérdida de la memoria y desatención
- Disminución en el rendimiento académico o laboral
“Este tipo de conductas pueden prevenirse y tratarse mediante intervenciones eficaces; para ello, el apoyo psicosocial del entorno familiar y afectivo dentro de la comunidad es clave”, subrayó la SSH.