Incomunican a familia e intentan extorsión telefónica en Mixquiahuala
A los padres les dijeron que tenían secuestrados a sus hijos; a éstos los amenazaron con hacer daño a su familia si se comunicaban o regresaban a su casa; SSPH frustra delito
Redacción – PACHUCA
Una familia fue incomunicada durante varias horas por un grupo criminal que pretendía consumar una extorsión telefónica en el municipio de Mixquiahuala.
El modus operandi utilizado por los delincuentes consistió en amenazar vía telefónica a dos adolescentes con hacerle daño a sus padres si se comunicaban con ellos o regresaban a su casa.
Les ordenaron abordar un vehículo del transporte público con dirección al centro de Progreso de Obregón y permanecer en esta población hasta que se los indicaran, mientras que a sus padres, también vía telefónica, les dijeron que tenía secuestrados a sus hijos, y a cambio de liberarlos les solicitaron una cantidad de dinero.
Sin embargo, el aviso oportuno a las autoridades por parte de los padres y la intervención inmediata del C5i permitió frustar la extorsión.
Tras conocer que los adolescentes habían sido vistos horas antes en el jardín central de Mixquiahuala, las unidades de Análisis Criminal y de Videovigilancia del C5i pudieron dar seguimiento al trayecto que previamente realizaron.
Así se pudo observar su paso por un local comercial y posteriormente abordar un vehículo de transporte público, del que obtuvieron características y ruta, con dirección al centro de Progreso, municipio aledaño.
Personal de la Agencia de Seguridad Estatal pudo ubicar al operador del servicio público, quien señaló que efectivamente había trasladado a los dos menores.
“Se implementó búsqueda por la zona para dar con el paradero de los jovencitos que fueron hallados deambulando y señalaron que los tenían amenazados vía telefónica de hacerle daño a su familia si se comunicaban o regresaban a su casa”, detalló la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) en un comunicado.
Con la certeza de que ambos se encontraban bien, los oficiales los trasladaron con sus padres, quienes desistieron de depositar el recurso que les exigían los malhechores. Además, procedieron a presentar la denuncia correspondiente.