Tecnologías de la Información y de las Comunicaciones (TIC): Industria 4.0 (parte 3)

“Lo que la mente puede imaginar, la mente lo puede crear”: Walt Disney
David Moisés Terán Pérez *
Estimadas(os) lectoras(es) de esta columna invitada. Excelente martes. Continuando con el desarrollo del tema de las TIC y su relación con la Industria 4.0, debemos establecer que en la actualidad los estrategas aconsejan a las empresas que consideran la adopción de Industria 4.0 planificar las futuras iniciativas de la compañía y maximizar el potencial productivo (Lalic et. al., 2017).
A medida que avanza la Industria 4.0, el modelo de negocio tradicional de fabricación está cambiando, y están surgiendo nuevos modelos. Como tal, las empresas ya posicionadas en el mercado deben actuar rápido para reconocer y reaccionar ante estos nuevos desafíos competitivos (Sung, 2018). Específicamente, los actuales ejecutivos deben considerar las siguientes opciones, descritas por Sung (2018), y estar atentos a otras que puedan estar implementando sus potenciales competidores (Baur & Wee, 2015):
El diseño y el desarrollo de plataformas, en que los productos, los bienes, los servicios y la información pueden intercambiarse a través de flujos predefinidos. Por ejemplo, los paquetes y/o programas (software) de código abierto, aplicado al contexto de la fabricación.
Los servicios de pago por uso, por suscripción y por membresía. Por ejemplo, Netflix, Amazon y Uber, entre muchas otras opciones.
Las empresas que otorgan licencias de propiedad intelectual. En la actualidad, muchas empresas manufactureras tienen una gran experiencia en sus productos y en sus procesos, pero carecen de la experiencia para generar valor a partir de sus datos.
Los negocios que monetizan sus datos a través de promociones, membresías y suscripciones.
Es importante también reconocer y evaluar los efectos económicos de la Industria 4.0, en particular, la digitalización y la transformación digital de los procesos de producción. Estos desarrollos implican desafíos considerables a nivel empresarial y político.
Los efectos de la Industria 4.0 se pueden reflejar en múltiples niveles: en ecosistemas completos, a nivel organizacional y a nivel individual de los empleados y de los clientes. En este sentido, la Industria 4.0: (1) Permite la toma de mejores decisiones, (2) Provoca que las organizaciones evolucionan y se adaptan a nuevas presiones y demandas y (3) Permite el empoderamiento tanto de los trabajadores como de los clientes (Deloitte, 2017). Muchos son los desafíos para la implementación de la Industria 4.0. Estos desafíos incluyen los siguientes:
- Aislar y resolver los posibles problemas de seguridad en las TIC.
- Garantizar una relativa fiabilidad y estabilidad necesarias para la comunicación crítica de máquina a máquina (M2M), incluida una latencia muy corta y estable.
- Lograr mantener la integridad de los procesos de producción.
- Evitar cualquier problema con las TIC, ya que causaría costosas interrupciones de producción.
- Proteger el conocimiento industrial (incluido también en los archivos de control para equipos de automatización industrial).
- Minimizar la falta de habilidades adecuadas para acelerar la marcha hacia la cuarta revolución industrial.
- Disminuir la amenaza de acciones repetitivas en los departamentos corporativos de las TIC.
- Eliminar la renuencia general al cambio, por parte de los agentes involucrados.
- Limitar la pérdida de muchos trabajos en favor de procesos automáticos y de los procesos controlados por las TIC, especialmente para la población trabajadora con menor nivel educación.
Quizás el aspecto más desafiante de implementar Industria 4.0 es el riesgo de seguridad de las TIC (Kumar et. al., 2016). La Industria 4.0 requerirá la integración en línea entre varias entidades, y esta integración en línea dará lugar a violaciones de la seguridad y a las fugas de datos (Sung, 2018). El robo cibernético sería otra amenaza peligrosa (Martin et. al., 2019). En este caso, el problema no es individual, y esto costará sustancialmente a los fabricantes, e/o incluso, podría dañar su reputación. Por lo tanto, la seguridad es un tema crucial que debe abordarse seria y objetivamente.
La transformación a la Industria 4.0 requerirá cuantiosas inversiones en nuevas tecnologías, y la decisión de tales transformaciones deberá tomarse a nivel de la gerencia y de la dirección general de las empresas (Sony & Naik, 2019).
Por tal razón, los riesgos deben calcularse y tomarse en serio. Si bien todavía se considera que es temprano para especular sobre problemas del empleo con el advenimiento de la Industria 4.0, lo más probable es que los trabajadores necesitarán adquirir habilidades, destrezas, competencias, valores y conocimientos diferentes, y/o adquirirlas(os) completamente nuevas(os) (Shamim et. al., 2016).
Esto puede ayudar a que aumenten las tasas de empleo calificado, pero también alienará a un gran sector de trabajadores. El sector de los trabajadores cuyo trabajo es quizás repetitivo y rutinario, enfrentará un duro desafío para mantener sus trabajos. Se deben introducir sistemas educativos nuevos y bastante diferentes, pero esto aún no resuelve el problema para los trabajadores de más edad.
Este es un problema estructural que por su naturaleza puede llevar bastante tiempo resolver. Finalmente, la privacidad no sólo es una preocupación del cliente, sino también del fabricante (Sung, 2018). En una red de Industria 4.0 interconectada, los fabricantes deben recopilar y analizar una gran cantidad de datos. Para las empresas, esto puede parecer una amenaza a su seguridad corporativa. Para los clientes puede considerarse una invasión en su privacidad personal. Reducir la brecha entre el consumidor y el fabricante será un gran desafío para ambas partes.
Por otro lado, la visión de la Industria 4.0 es que, en el futuro, el sector industrial construirá redes globales para conectar sus máquinas, sus fábricas, sus depósitos de almacenamiento como sistemas ciber-físicos, los cuales se conectarán y controlarán entre sí inteligentemente compartiendo información que les permita tomar decisiones.
Esos sistemas ciber-físicos, tomarán la forma de fábricas inteligentes, máquinas inteligentes, depósitos de almacenamiento inteligentes y cadenas de valor inteligentes (Gilchrist, 2016). En el centro de la visión de la Industria 4.0 está la fábrica inteligente, la cual cambiará la manera en que se produce actualmente, basada no solamente en máquinas inteligentes, sino también en productos inteligentes. Los productos elaborados también serán inteligentes, así que ellos pueden ser identificados y localizados todo el tiempo a través del proceso de una manufactura inteligente y esbelta (es decir, con cero desperdicios). Por ejemplo, la miniaturización de las etiquetas de identificación por radiofrecuencia (RFID) permitirá que los productos sean inteligentes y sepan qué son, cuándo fueron manufacturados, cuál es su estado actual, y cuáles son los pasos requeridos para alcanzar su estado deseado (Gilchrist, 2016).
Otro elemento clave en la visión de la Industria 4.0 es la integración de los procesos de manufactura verticales en la cadena de valor. Así que los sistemas horizontales son integrados con los procesos verticales (ventas, logística, finanzas, entre otros), y con los sistemas de tecnologías para la información asociados. Ello permitirá a las fábricas inteligentes, controlar la administración del proceso completo de manufactura desde la cadena de suministros pasando por los servicios y la administración del ciclo de vida (Gilchrist, 2016).
Como conclusión a esta entrega semanal, la Industria 4.0 implementa las herramientas proporcionadas por los avances en las tecnologías de la información y de las comunicaciones (TIC) y en las tecnologías operacionales para aumentar los niveles de automatización y de digitalización de la producción, y en los procesos industriales y de manufactura.
El objetivo es gestionar todo el proceso de la cadena de valor, mejorando la efectividad en el proceso de producción, y creando productos, bienes y servicios de calidad superior. Esta visión sigue la máxima de mayor calidad, pero no a expensas de un precio más bajo. Esta filosofía ha producido la fábrica inteligente del futuro, donde las eficiencias y los costos mejoran y las ganancias aumentan. Esta fábrica del futuro ya está aquí, como una que opera con eficiencia silenciosa, donde todos los procesos, impulsados por sistemas ciber-físicos y humanos por igual, son diferentes a las fábricas tradicionales, ya que funcionan en entornos casi estériles, limpios, seguros, confiables y efectivos. (Continuará…)
Referencias
Baur, C. & Wee, D. (2015). Manufacturing’s next act. McKinsey & Company.
Gilchrist, A. (2016). Industry 4.0: The industrial Internet of Things. Bangken, Nonthaburi, Thailand: Apress.
Kumar, S. A.; Vealey, T. & Srivastava, H. (2016). Security in Internet of Things: Challenges, solutions and future directions. In 2016 49th Hawaii International Conference on System Sciences (HICSS) (p.p. 5772-5781). IEEE.
Lalic, B.; Majstorovic, V.; Marjanovic, U.; Delić, M. & Tasic, N. (2017). The effect of Industry 4.0 concepts and e-learning on manufacturing firm performance: Evidence from transitional economy. In IFIP International Conference on Advances in Production Management Systems (p.p. 298-305). Springer, Cham.
Schuh, G.; Anderl, R.; Gausemeier, J.; Ten Hompel, M. & Wahlster, W. (eds.). (2017). Industry 4.0 maturity index. managing the digital transformation of companies. Acatech Studie. Utz, Herbert, München, Deutschland.
Shamim, S.; Cang, S.; Yu, H. & Li, Y. (2016). Management approaches for Industry 4.0: A human resource management perspective. In 2016 IEEE Congress on Evolutionary Computation (CEC) (p.p. 5 309-5 316). IEEE.
Sony, M. & Naik, S. (2019). Ten lessons for managers while implementing Industry 4.0. IEEE Engineering Management Review.
Sung, T. K. (2018). Industry 4.0: A Korea perspective. Technological Forecasting and Social Change, num. 132, p.p. 40-45.