La amistad entre animales y personas
• Estudios realizados por científicos han demostrado que los animales pueden experimentar sentimientos y emociones similares a los de los humanos
🖋 Verónica Bracho Alburquerque *
Bonjour chers lecteurs, les saludo en otro idioma, porque presumo que inicié clases de francés en la aplicación Duolingo. Después de este presumido intermedio, terminamos el mes de febrero con este artículo: “La amistad entre animales y personas”.
Son varios los casos especiales que se muestran entre las personas y los animales, incluso entre animales de diferentes especies. Aquí algunas famosas historias:
PRIMERA HISTORIA
Dindin, un pingüino que estaba agonizando en una playa en Brasil, y un hombre de 71 años, que lo encontró y lo rescató, llevándoselo a su casa, en donde lo curó y lo cuidó. Ya recuperado lo devolvió al mar. Lo que nunca imaginó el señor es que ese pequeño pingüino volviera al mismo lugar, para acompañarlo cada año por varios meses.
SEGUNDA HISTORIA
Está el caso de un hombre de Argentina de nombre Miguel, quien murió en marzo de 2016, y su perro llamado “Capitán”, que todos los días iba a su tumba. La esposa de Miguel explicó que de repente desapareció el perro y le perdieron el rastro.
Un día fueron a la tumba de su marido y ahí estaba “Capitán”. El perrito regresó a su casa, pero diario visitó la tumba, lugar en donde precisamente murió en febrero de 2018. Este caso es muy parecido al perrito japonés que se quedó esperando a su dueño en la estación del tren. Esa historia incluso ha sido escrita y llevada al cine.
TERCERA HISTORIA
Esta es una historia de amistad entre una elefanta y un perro. Tarra, una elefanta asiática, vivía en un santuario de elefantes en Tennessee. Un día, el personal del santuario encontró a Bella, una perra abandonada y herida, cerca de las instalaciones. Tarra inmediatamente se encariñó con Bella y se volvieron compañeras inseparables, pasando la mayor parte del tiempo juntas, jugando y cuidándose mutuamente.
CUARTA HISTORIA
Owen y Mzee, otra amistad poco común.
Estudios realizados por científicos han demostrado que los animales pueden experimentar sentimientos y emociones similares a los de los humanos. Así, los perros pueden manifestar celos, los peces fiebre emocional o las orcas empatía. Incluso, el dolor que sufren los gansos es muy parecido al de los niños pequeños.
Los animales sienten una gama completa de emociones, incluyendo: miedo, alegría, rabia, amor, placer, respeto, compasión, vergüenza, tristeza, dolor, desesperación, resentimiento. Incluso, muestran más civismo que los mismos humanos.
Hasta la próxima, y me despido con mis queridos gatos: Robín (el naranja europeo) y Gatómic (el siamés).
