Murieron 6 internos en penitenciarías de Hidalgo en segundo semestre de 2018
En ese periodo también ocurrió un intento de fuga en el Cereso de Tulancingo, destaca informe de la CDHEH; persiste sobrepoblación en cárceles
Oliver García – PACHUCA
La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH) registró la muerte de cinco internos durante el segundo semestre de 2018; además, ocurrió un intento de fuga en la penitenciaría de Tulancingo de Bravo.
Según el diagnóstico en 12 Centros de Readaptación Social (Ceresos), tres cárceles distritales y el Centro de Internamiento para Adolescentes, en la capital del estado murieron dos, por sepsis abdominal y neumonía.
Asimismo, una persona perdió la vida en la Huasteca por intoxicación, mientras una perotinitis secundaria perforación vascular causó el deceso de un individuo en Ixmiquilpan. Otro más falleció en Mixquiahuala por diabetes, hipertensión e insuficiencia renal.
El documento menciona que de las cuatro mil 10 personas tras las rejas, 36 presentan enfermedades de tipo mental y 12 viven con VIH.
Sobrepoblación
De acuerdo con el informe, 11 de los 16 centros de reclusión analizados tiene sobrepoblación. En la cárcel distrital alcanza 133 por ciento, pues está diseñada para 100 personas y alberga 174. Asimismo, Ixmiquilpan tiene 146 internos, pese a su capacidad para 73.
En el estado cuatro mil 10 personas se encuentran tras las rejas; no obstante, los espacios fueron planeados para tres mil 547 personas, por lo que de manera global hay una sobrepoblación de 13 por ciento.
Señala que se rehabilitaron cocina, espacios deportivos, dormitorios y se incorporaron espacios educativos en Mixquiahuala, Actopan, Tenango de Doria, Apan, Jacala, Tulancingo, Huichapan, Tula, Pachuca, Ixmiquilpan y Molango.
Extranjeros
La comisión informó que 21 personas privadas de su libertad son de origen extranjero. Siete de ellas provienen de Honduras, cinco de Colombia, tres de Estados Unidos, tres de El Salvador, además de uno de Perú, República Dominicana y Guatemala.
Jacala, Molango, Mixquiahuala, Pachuca, Tizayuca y Tulancingo registran la mayoría de riñas y agresiones entre las personas privadas de su libertad.
Por ello, para prevenir la ingobernabilidad la comisión pidió el reforzamiento de la vigilancia durante el ingreso a los ceresos, así como mantener operativos para la revisión de los presos de forma continua.
Cárceles distritales
La CDHEH recomendó el cierre de las cárceles distritales de Zacualtipán, Atotonilco el Grande y Tizayuca, como ocurrió con los penales de Zimapán y Metztitlán en 2017, pues estos espacios no están diseñados para la reinserción social, pues su finalidad es albergar a sujetos que cometieron alguna falta administrativa.
Instó a las autoridades a “insistir en la necesidad de disminuir la sobrepoblación en los centros de internamiento, con la edificación de los centros penitenciarios que sean necesarios, lo que permitirá evitar la sobrepoblación en los centros y cárceles”.