Para seguir cobrando, regresan diputados “chapulines” al Congreso
Luego de que el proceso electoral fue suspendido por la pandemia de Covid-19, Ricardo Baptista, Susana Ángeles, Jorge Mayorga y Areli Rubí Miranda se reincorporaron a los “trabajos” del Legislativo local
Oliver García – PACHUCA
Los diputados Ricardo Raúl Baptista González, Susana Ángeles Quezada, Jorge Mayorga Olvera y Areli Rubí Miranda Ayala, quienes se encontraban con licencia al cargo para participar en la elección de ayuntamientos, se reincorporaron a sus actividades legislativas, por las que perciben una remuneración neta de 48 mil 48 pesos mensuales.
La ley establece que los integrantes del Poder Legislativo deben renunciar al puesto al menos 90 días antes de los comicios de alcaldes, pero como el Instituto Nacional Electoral (INE) suspendió de manera temporal el proceso por la pandemia de Covid-19 los representantes optaron por regresar al cargo y seguir cobrando su dieta.
Los días 3 y 5 de marzo, un total de 14 legisladores dejaron su puesto para contender por una presidencia municipal. El 17 de marzo, la priista Mayka Ortega Eguiluz asumió nuevamente su cargo y ese mismo día 12 congresistas suplentes rindieron protesta.
El único que no había acudido a ocupar el cargo es Salvador Sosa Arroyo, sobrino del líder del Grupo Universidad, Gerardo Sosa Castelán, quien sustituyó este martes al legislador José Antonio Hernández Vera en el distrito de Tulancingo.
Este día, cuatro diputados regresaron a sus curules, de los cuales los primeros tres pertenecen a Morena, mientras que Miranda Ayala llegó al cargo gracias al PRD, aunque se registró como precandidata morenista en Atotonilco de Tula.
Esta diputada incumplió el acuerdo interno del PRD para que la mitad del periodo fuese ocupado por su suplente, María de los Ángeles Godínez Granillo, quien se desempeñó como diputada durante menos de un mes.